Espiritualidad y ansiedad

Esta semana ha sido un verdadero caos.

Empecé la semana con bastantes cosas en la cabeza pero con un buen pico de energía. Este eclipse fue bastante intenso, la verdad. Supongo que por que a nivel personal me caía en un punto clave de mi carta natal.

Primera sesión de Astrología

La semana pasada os contaba que para mi cumple, me decidí a lanzar las terapias de astrología, algo que llevo años estudiando y practicando, y que sabéis que me apasiona. Pues el lunes pasado, justo con esa luna nueva en Aries maravillosa, pasé la primera consulta. Y me sentí genial, confiada en mí y en mis guías, que se que siempre están para apoyar. Tuve claro que iba a ser una parte importante en mi camino, porque sentí que podía ayudar a niveles más profundos. Además pude combinarlo con la aromaterapia y es como dar en la clave. Esa sensación de llevar tiempo buscando como hacer algo y de pronto sentir que has encontrado ese camino. Creo que la persona se fue contenta y que la sesión le fue de ayuda, que al final es lo más importante.

Productos artesanales

Por otro lado estuve trabajando en mis productos artesanales, algo que me apetece mucho retomar. Me puse con unas velas que hice el año pasado para una feria en Barcelona, y que tenía ganas de volver a hacer. Ya de por sí el trabajo con velas me parece increíble a nivel mágico, pero es que si esas velas llevan plantas y una consagración... Así que prepararlas para facilitar el proceso a otras personas la verdad es que me gusta, es relajante y creativo. Aún no están todos, pero os voy a dejar un enlace a una tienda online donde hay una categoría con mis productos y desde ahí podéis comprarlos. Poco a poco irán apareciendo más. Además es una tienda preciosa, y si os gusta la temática bruji, esta os va a encantar

Enlace a la tienda: -> https://www.centroesotericoluzdeluna.es/?Categor%C3%ADa=Morgana%2520Biot%25C3%25A1ille

Reflexiones de esta semana

... y entonces llegó el pico de ansiedad

Después de una semana de trabajo y algunas preocupaciones, empezó el malestar y el bajón que ello conlleva. La verdad es que soy una persona que tiende al estrés fácilmente, me cuesta relajarme y eso hace que todo se descompense. En este caso con un agarrotamiento tremendo de la espalda que me hizo parar, quiera o no.

No me voy a meter en contaros todo el tema, pero si os quería compartir una reflexión que hice estos días.

A veces pensamos que las personas que cultivan su espiritualidad y están en estos temas, no tienen permiso para tener caídas. Y si os ha pasado alguna vez, seguro que habéis oído frases como "con lo que sabes y estás así...", "no le des importancia, sabes que todo pasa por algo..." o "enciende una velita".

Y por supuesto que se nos permite estar mal, desde tener un día que no nos apetece nada o incluso pasar por un momento de frustración con nosotros y con el Universo si hace falta (algo que nos puede llevar incluso a la Noche Oscura del Alma si el proceso que hemos vivido es muy doloroso, como la pérdida de un familiar). Porque somos humanos. Y quizá para mí esta es la clave.

Si decidimos bajar como Almas a encarnar a la Tierra, para vivir toda la experiencia humana, con sus luces y sombras, vivir es exactamente eso. Sumergirse en la vida, en las emociones y en su intensidad. No quiere decir que tengamos que quedarnos en esa emoción permanentemente ojo, hay un avance. Pero si algo nos ha hecho sentir, creo que es bueno pararse, quedarse un ratito ahí, observarse, aprender y luego empezar a trabajar para procesarlo.

Con la espiritualidad pasa lo mismo. Es sano vivir la vida en primera persona, y no desligarse o dejar toda la responsabilidad al "destino", el "karma" o el "Universo". Permitirnos ser humanos, y luego desde ahí, con las herramientas que tenemos transitar el camino.

En mi caso han sido días en los que la mente ha ganado, tomó su protagonismo y me desestabilizó diferentes puntos. No es agradable y os puedo asegurar que en ese momento no quería encender una vela o ignorar mis sentimientos negativos diciendo que "es parte del aprendizaje y ya se pasará". Eso sí, en cuanto he estado mejor y he vivido la experiencia, ahora si puedo hacerme cargo con las herramientas. Y desde ahí comienza el Trabajo de Sombras. Pero creo que para poder hacerlo, hay que dejar que la sombra se dé, no reprimirla.

No sé si para vosotros esto tiene sentido, pero me pareció curioso como a veces la parte oscura de la vida tendemos a querer ignorarla, desde algo pequeño hasta algo grande. Y esto ocurre desde diferentes ramas. Así que quería compartir con vosotros estos pensamientos. O seré yo, que vivo con mucha intensidad jaja.

Dicho esto, os cuento que estoy mejorando con la espalda, y procesando que quiere decir mi cuerpo con este aviso. Esta semana está siendo de descanso, de reflexión y de hacer esas pequeñas cosas para las que nunca tenemos tiempo.

Nos leemos el Domingo. Que tengáis una feliz semana.